🗓️29 enero 2025🗓️
🌿 “La Buena Semilla”🌿
Os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú. (Deuteronomio 30:19)
(Jesús dijo:) Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. (Mateo 11:28)
La elección correcta
Todos los hombres necesitan encontrar un sentido a su vida, un objetivo hacia el cual dirigirse… Si alguien le pregunta cuál es el objetivo de su vida, ¿qué le responderá?
Si esta pregunta lo interpela y lo deja sin respuesta, lo invitamos a leer la Biblia. Dios le mostrará el sentido que quiere dar a su vida. Él es el origen de todo. Si hoy estamos vivos es porque Dios así lo ha querido y tiene un propósito para nosotros. Dios tiene un plan para nuestra vida terrenal y para el más allá. El primer objetivo que tiene para nosotros es que lleguemos a conocerlo. Para ello se reveló en la persona de Jesús, su Hijo, quien vino hasta nosotros. Jesús nos abrió el camino hacia Dios mediante su muerte y su resurrección. Dios desea tener una relación llena de amor con cada uno de nosotros. Aceptando a Jesús como su Salvador y Señor, usted también tendrá un amigo que lo conoce perfectamente. Un amigo que lo ayudará, lo animará y lo guiará cada día de su vida.
La vida aquí en la tierra nos prepara para la eternidad, y solo hay dos destinos finales. El hombre que va por la vida sin tener en cuenta a Dios estará lejos de él para siempre. Pero el que reconoce que es un pecador, que necesita un Salvador, y acepta la gracia de Dios, pasará la eternidad junto a él. Camina hacia el cielo lleno de confianza, junto a Jesús, quien lo ama y lo ha salvado de la muerte eterna. Sin cesar, Dios llama a su criatura a volverse a él. No obliga a nadie, pero le invita a tomar la decisión correcta.
¿Cuál es su destino final?
🌿 “La Buena Semilla”🌿
Os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú. (Deuteronomio 30:19)
(Jesús dijo:) Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. (Mateo 11:28)
La elección correcta
Todos los hombres necesitan encontrar un sentido a su vida, un objetivo hacia el cual dirigirse… Si alguien le pregunta cuál es el objetivo de su vida, ¿qué le responderá?
Si esta pregunta lo interpela y lo deja sin respuesta, lo invitamos a leer la Biblia. Dios le mostrará el sentido que quiere dar a su vida. Él es el origen de todo. Si hoy estamos vivos es porque Dios así lo ha querido y tiene un propósito para nosotros. Dios tiene un plan para nuestra vida terrenal y para el más allá. El primer objetivo que tiene para nosotros es que lleguemos a conocerlo. Para ello se reveló en la persona de Jesús, su Hijo, quien vino hasta nosotros. Jesús nos abrió el camino hacia Dios mediante su muerte y su resurrección. Dios desea tener una relación llena de amor con cada uno de nosotros. Aceptando a Jesús como su Salvador y Señor, usted también tendrá un amigo que lo conoce perfectamente. Un amigo que lo ayudará, lo animará y lo guiará cada día de su vida.
La vida aquí en la tierra nos prepara para la eternidad, y solo hay dos destinos finales. El hombre que va por la vida sin tener en cuenta a Dios estará lejos de él para siempre. Pero el que reconoce que es un pecador, que necesita un Salvador, y acepta la gracia de Dios, pasará la eternidad junto a él. Camina hacia el cielo lleno de confianza, junto a Jesús, quien lo ama y lo ha salvado de la muerte eterna. Sin cesar, Dios llama a su criatura a volverse a él. No obliga a nadie, pero le invita a tomar la decisión correcta.
¿Cuál es su destino final?
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📖✨ Estar Dispuesto ✨📖
Dios no busca a los más capacitados, sino a los que tienen un corazón dispuesto. Jeremías tenía miedo, pero Dios le dijo: "No temas, porque Yo estaré contigo" (Jeremías 1:8). Cuando Dios te llama, Él mismo te capacita. No pongas excusas, solo confía en Su propósito.
🙌 ¿Estás listo para decirle: "Aquí estoy, Señor, envíame" (Isaías 6:8)?
🔄 Comparte este mensaje y bendice a alguien más. ¡Dios te use y te guarde! 💙
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Dios no busca a los más capacitados, sino a los que tienen un corazón dispuesto. Jeremías tenía miedo, pero Dios le dijo: "No temas, porque Yo estaré contigo" (Jeremías 1:8). Cuando Dios te llama, Él mismo te capacita. No pongas excusas, solo confía en Su propósito.
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El arrepentimiento es una obra de Dios en el corazón del ser humano, no un acto independiente de la voluntad del hombre. En 2 Timoteo 2:25-26, Pablo instruye a Timoteo a corregir con mansedumbre a los que se oponen, porque solo Dios puede concederles el arrepentimiento para que lleguen al conocimiento de la verdad y escapen del lazo del diablo. Esta enseñanza es fundamental, ya que muchos creen que el arrepentimiento es algo que el hombre puede producir por sí mismo, pero la Biblia deja claro que es Dios quien lo otorga. En Hechos 11:18, cuando los discípulos escucharon que los gentiles también habían recibido la salvación, dijeron: "¡De manera que también a los gentiles ha dado Dios arrepentimiento para vida!" Esto confirma que el arrepentimiento no es simplemente una decisión humana, sino un regalo divino que conduce a la vida eterna. Asimismo, Romanos 2:4 nos recuerda que es "la benignidad de Dios la que nos guía al arrepentimiento", no nuestra propia justicia o buenas obras. Si dependiera del hombre, nadie se arrepentiría, porque la naturaleza humana caída está en enemistad con Dios (Romanos 8:7) y el corazón del hombre es engañoso y perverso (Jeremías 17:9). Además, Jesús mismo afirmó en Juan 6:44: "Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere", lo que demuestra que el hombre no tiene la capacidad de acercarse a Dios por sí solo, sino que necesita ser atraído por el Padre. En Ezequiel 36:26-27, Dios promete: "Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos y los pongáis por obra". Esto muestra que la transformación del hombre es obra de Dios, quien cambia su corazón endurecido y lo hace receptivo a la verdad. De igual manera, en Filipenses 2:13 Pablo afirma que "Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad", enfatizando que ni siquiera el deseo de buscar a Dios proviene del hombre, sino que es Dios quien lo pone en su interior. Por eso, la salvación no es un mérito humano, sino una obra enteramente de la gracia de Dios, desde el arrepentimiento hasta la fe. Sin la intervención de Dios, el hombre seguiría esclavo del pecado y bajo el poder del diablo, como dice Efesios 2:1-2: "Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire". Estar muerto espiritualmente significa no tener la capacidad de responder a Dios, por lo que solo su poder puede traer vida y arrepentimiento. En última instancia, el arrepentimiento es una muestra de la misericordia y soberanía de Dios, quien llama a su pueblo a volver a Él y les concede la capacidad de hacerlo, no por méritos propios, sino por su gracia infinita.
Santiago 1:22-25👇🏻
Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos.
Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural.
Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era.
Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace.
💙📖🙌🏻
Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos.
Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural.
Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era.
Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace.
💙📖🙌🏻
🗓️ 30 enero 2025🗓️
🌿“La Buena Semilla”🌿
A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer. (Juan 1:18)
En estos postreros días (Dios) nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo. (Hebreos 1:2)
¿Quiere conocer a Dios?
A menudo un amigo mío me pregunta sobre la existencia de Dios y mi fe. Una vez le respondí:
–¿Has observado una flor? ¿Has pensado profundamente en quién eres? Que Dios exista me parece obvio. Pero, ¿sabes que él te ha dado una boca que te permite hablarle? Y él mismo también nos habla por medio de la Biblia. Por ejemplo: “Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía” (Hebreos 11:3).
–Quizá tengas razón, pero es demasiado simple, y luego la fe… no la entiendo.
La Biblia afirma que muchos rechazarán la verdad sobre Dios, a pesar de las numerosas pruebas. Pero a los que desean conocer a Dios, les dice: “Me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón” (Jeremías 29:13).
Argumentar sobre la existencia de Dios, suponer que no existe, es situarse por encima de él. Buscar a Dios con todo el corazón es muy diferente. Es volverse a un Dios que no solo es sabio e infinito en conocimiento, sino que está lleno de amor. Dios es luz, Dios es amor. Es un Dios amoroso y, por lo tanto, un Dios que quiere relacionare con el hombre. Si buscas a Dios, lo encontrarás. Si le hablas, te responderá. Si lees la Biblia, te hablará de Jesús, su Hijo, quien vino a la tierra a “buscar y a salvar lo que se había perdido” (Lucas 19:10).
🌿“La Buena Semilla”🌿
A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer. (Juan 1:18)
En estos postreros días (Dios) nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo. (Hebreos 1:2)
¿Quiere conocer a Dios?
A menudo un amigo mío me pregunta sobre la existencia de Dios y mi fe. Una vez le respondí:
–¿Has observado una flor? ¿Has pensado profundamente en quién eres? Que Dios exista me parece obvio. Pero, ¿sabes que él te ha dado una boca que te permite hablarle? Y él mismo también nos habla por medio de la Biblia. Por ejemplo: “Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía” (Hebreos 11:3).
–Quizá tengas razón, pero es demasiado simple, y luego la fe… no la entiendo.
La Biblia afirma que muchos rechazarán la verdad sobre Dios, a pesar de las numerosas pruebas. Pero a los que desean conocer a Dios, les dice: “Me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón” (Jeremías 29:13).
Argumentar sobre la existencia de Dios, suponer que no existe, es situarse por encima de él. Buscar a Dios con todo el corazón es muy diferente. Es volverse a un Dios que no solo es sabio e infinito en conocimiento, sino que está lleno de amor. Dios es luz, Dios es amor. Es un Dios amoroso y, por lo tanto, un Dios que quiere relacionare con el hombre. Si buscas a Dios, lo encontrarás. Si le hablas, te responderá. Si lees la Biblia, te hablará de Jesús, su Hijo, quien vino a la tierra a “buscar y a salvar lo que se había perdido” (Lucas 19:10).
Dia 2.629 Una Pregunta Transformadora ( Rodrigo Riaño Del Castillo…
TEMA
Una Pregunta Transformadora
Narra:
Rodrigo Riaño Del Castillo
Una Pregunta Transformadora
Narra:
Rodrigo Riaño Del Castillo
💔 Dios Sana los Corazones Quebrantados 💔
A veces la vida duele. Hay momentos en los que sentimos que nuestro corazón está roto en mil pedazos y que nada puede arreglarlo. Pero Dios nos promete algo hermoso:
"Él sana a los de corazón quebrantado y les venda las heridas" (Salmo 147:3).
No importa lo que estés pasando, cuánto hayas sufrido o lo difícil que parezca seguir adelante. Dios ve tu dolor, te sostiene y poco a poco restaura lo que parecía imposible de sanar.
Si hoy te sientes herido, no estás solo. Dios está contigo, amándote, sanándote y recordándote que aún hay esperanza. 🙏❤️
A veces la vida duele. Hay momentos en los que sentimos que nuestro corazón está roto en mil pedazos y que nada puede arreglarlo. Pero Dios nos promete algo hermoso:
"Él sana a los de corazón quebrantado y les venda las heridas" (Salmo 147:3).
No importa lo que estés pasando, cuánto hayas sufrido o lo difícil que parezca seguir adelante. Dios ve tu dolor, te sostiene y poco a poco restaura lo que parecía imposible de sanar.
Si hoy te sientes herido, no estás solo. Dios está contigo, amándote, sanándote y recordándote que aún hay esperanza. 🙏❤️
En Lucas 4:16-30, Jesús, después de leer Isaías 61:1-2 en la sinagoga de Nazaret y declarar que esa profecía se cumplía en Él, enfrentó la incredulidad de sus paisanos. Ellos se maravillaban de sus palabras, pero dudaban diciendo: "¿No es este el hijo de José?" (Lucas 4:22). Ante esto, Jesús les respondió: "Sin duda me diréis este refrán: Médico, cúrate a ti mismo; todo lo que hemos oído que se ha hecho en Capernaum, hazlo también aquí en tu tierra" (Lucas 4:23), señalando que ellos querían ver milagros, no creer en su mensaje. Luego, les recordó cómo en tiempos de Elías, aunque había muchas viudas en Israel, Dios envió al profeta a ayudar a una extranjera, la viuda de Sarepta en Sidón (1 Reyes 17:8-16), y cómo en tiempos de Eliseo, aunque había muchos leprosos en Israel, solo Naamán, un sirio, fue sanado (2 Reyes 5:1-14). Tanto la viuda de Sarepta como Naamán eran gentiles, lo que enfatizaba que la bendición de Dios no era exclusiva para Israel, sino también para las naciones. Al oír esto, los judíos presentes "se llenaron de ira", lo expulsaron de la ciudad y trataron de despeñarlo desde un monte (Lucas 4:28-29), mostrando su rechazo a Cristo. Su incredulidad los condenaba, pues Jesús mismo dijo: "Si no creéis que yo soy, en vuestros pecados moriréis" (Juan 8:24). Estos judíos no eran salvos, porque rechazaron al único que podía darles vida eterna.
Santiago 4:5-8👇🏻
¿O pensáis que la Escritura dice en vano: El Espíritu que él ha hecho morar en nosotros nos anhela celosamente?
Pero él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.
Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros.
Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones.
💙📖🙌🏻
¿O pensáis que la Escritura dice en vano: El Espíritu que él ha hecho morar en nosotros nos anhela celosamente?
Pero él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.
Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros.
Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones.
💙📖🙌🏻
🗓️18 enero 2023 🗓️
🌿 “La Buena Semilla”🌿
Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero. (1 Timoteo 1:15)
En la cárcel
Testimonio
«Debido a un tipo de demencia, y como había cometido varios actos muy violentos, fui llevado a un hospital psiquiátrico, y luego a la cárcel. Allí conocí a Randy, un prisionero cristiano, quien a menudo oraba y leía la Biblia. Siempre me burlaba de su fe, pero a pesar de ello nos hicimos amigos. Día tras día sus preguntas y las respuestas que daba a las mías empezaron a desestabilizarme. Antes creía que la resurrección de Jesús era una historia inventada para la gente ingenua… Pero poco a poco me dije que si alguien estaba dispuesto a morir por una causa, ¡esta debía ser realmente seria! Si los apóstoles estaban dispuestos a morir por Jesús, era porque verdaderamente lo habían visto vivo, resucitado.
Mis convicciones se desmoronaron una tras otra. De pensar que yo era un hombre mejor que los otros, pasé a creer que era el peor de todos. ¿Quién podía amarme y darme una nueva vida? Tal vez Jesús, de quien Randy me hablaba con frecuencia. Entonces me puse de rodillas y oré: “Dios, no sé si voy a creer en ti mañana, pero creo en ti ahora. Si quieres hacer un trabajo en mí, hazlo por favor”. Cuando me levanté de mi oración, por primera vez desde hacía años, no quería hacerle daño a nadie.
Yo, que era un hombre violento y blasfemo, obtuve misericordia; la gracia de nuestro Señor sobreabundó, para que sirva de ejemplo a los que creerán en él para vida eterna (1 Timoteo 1:16)».
David
🌿 “La Buena Semilla”🌿
Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero. (1 Timoteo 1:15)
En la cárcel
Testimonio
«Debido a un tipo de demencia, y como había cometido varios actos muy violentos, fui llevado a un hospital psiquiátrico, y luego a la cárcel. Allí conocí a Randy, un prisionero cristiano, quien a menudo oraba y leía la Biblia. Siempre me burlaba de su fe, pero a pesar de ello nos hicimos amigos. Día tras día sus preguntas y las respuestas que daba a las mías empezaron a desestabilizarme. Antes creía que la resurrección de Jesús era una historia inventada para la gente ingenua… Pero poco a poco me dije que si alguien estaba dispuesto a morir por una causa, ¡esta debía ser realmente seria! Si los apóstoles estaban dispuestos a morir por Jesús, era porque verdaderamente lo habían visto vivo, resucitado.
Mis convicciones se desmoronaron una tras otra. De pensar que yo era un hombre mejor que los otros, pasé a creer que era el peor de todos. ¿Quién podía amarme y darme una nueva vida? Tal vez Jesús, de quien Randy me hablaba con frecuencia. Entonces me puse de rodillas y oré: “Dios, no sé si voy a creer en ti mañana, pero creo en ti ahora. Si quieres hacer un trabajo en mí, hazlo por favor”. Cuando me levanté de mi oración, por primera vez desde hacía años, no quería hacerle daño a nadie.
Yo, que era un hombre violento y blasfemo, obtuve misericordia; la gracia de nuestro Señor sobreabundó, para que sirva de ejemplo a los que creerán en él para vida eterna (1 Timoteo 1:16)».
David