Un compañero nos presenta esta nueva imposición, el Proyecto Catalina, que consiste en una planta de producción de hidrógeno verde a gran escala en Andorra (Teruel), cuyo producto se transportará por hidro ducto hasta el Puerto de Sagunto (Valencia).
Se utilizará inicialmente en la planta de Fertiberia para producir amoníaco verde y, en una segunda fase, se prevé exportarlo mediante grandes buques.
El proyecto se presenta como una apuesta por la economía circular, la sostenibilidad y la creación de empleo, pero la realidad es que se hará un uso intensivo de agua limpia: La electrólisis para producir hidrógeno requiere gran cantidad de agua, bien sean superficiales o subterráneas, lo que genera preocupación en Aragón, donde ya existen problemas con los derechos históricos de riego.
Pero lo mismo que en Aragón, puede ocurrir con los derechos históricos de riego en la zona del río Palancia, -parte oeste del Camp de Morvedre, es decir, comarca de Sagunto-, hasta su delta, entre el Puerto de Sagunto y Canet de Berenguer.
Impacto en los regantes aragoneses y valencianos: Podría afectar negativamente a las comunidades de regantes y pozos de riego agrícolas, ya que se estarían priorizando intereses energéticos sobre los derechos históricos de riego.
Dudas sobre la “sostenibilidad”: ✅Señala que, aunque el hidrógeno se vende como energía limpia, se necesitarán energías “sucias” (como diésel) para la construcción, pero sobre todo para su mantenimiento y reciclaje de las infraestructuras solares y eólicas, que a fecha de hoy no existe. ✅ Efectos negativos en el Puerto de Sagunto: Se anuncia que podrían existir consecuencias negativas para dicha población, ante posibles escapes de una sustancia tóxica y corrosiva como es el amoníaco, además del peligro en el manejo del hidrógeno, -altamente inflamable-, sin obviar el gran trasiego de trenes, vehículos pesados y grandes buques mercantes, que harían desvalorizar las zonas residenciales y el turismo.
El Proyecto Catalina está en fase incipiente, no ha llegado a la fase de exposición pública, cuando eso ocurra podremos presentar alegaciones.
Estaremos alertas para colaborar en todo lo que podamos desde el Sector Primario y Consumidores.
Un compañero nos presenta esta nueva imposición, el Proyecto Catalina, que consiste en una planta de producción de hidrógeno verde a gran escala en Andorra (Teruel), cuyo producto se transportará por hidro ducto hasta el Puerto de Sagunto (Valencia).
Se utilizará inicialmente en la planta de Fertiberia para producir amoníaco verde y, en una segunda fase, se prevé exportarlo mediante grandes buques.
El proyecto se presenta como una apuesta por la economía circular, la sostenibilidad y la creación de empleo, pero la realidad es que se hará un uso intensivo de agua limpia: La electrólisis para producir hidrógeno requiere gran cantidad de agua, bien sean superficiales o subterráneas, lo que genera preocupación en Aragón, donde ya existen problemas con los derechos históricos de riego.
Pero lo mismo que en Aragón, puede ocurrir con los derechos históricos de riego en la zona del río Palancia, -parte oeste del Camp de Morvedre, es decir, comarca de Sagunto-, hasta su delta, entre el Puerto de Sagunto y Canet de Berenguer.
Impacto en los regantes aragoneses y valencianos: Podría afectar negativamente a las comunidades de regantes y pozos de riego agrícolas, ya que se estarían priorizando intereses energéticos sobre los derechos históricos de riego.
Dudas sobre la “sostenibilidad”: ✅Señala que, aunque el hidrógeno se vende como energía limpia, se necesitarán energías “sucias” (como diésel) para la construcción, pero sobre todo para su mantenimiento y reciclaje de las infraestructuras solares y eólicas, que a fecha de hoy no existe. ✅ Efectos negativos en el Puerto de Sagunto: Se anuncia que podrían existir consecuencias negativas para dicha población, ante posibles escapes de una sustancia tóxica y corrosiva como es el amoníaco, además del peligro en el manejo del hidrógeno, -altamente inflamable-, sin obviar el gran trasiego de trenes, vehículos pesados y grandes buques mercantes, que harían desvalorizar las zonas residenciales y el turismo.
El Proyecto Catalina está en fase incipiente, no ha llegado a la fase de exposición pública, cuando eso ocurra podremos presentar alegaciones.
Estaremos alertas para colaborar en todo lo que podamos desde el Sector Primario y Consumidores.
There have been several contributions to the group with members posting voice notes of screaming, yelling, groaning, and wailing in different rhythms and pitches. Calling out the “degenerate” community or the crypto obsessives that engage in high-risk trading, Co-founder of NFT renting protocol Rentable World emiliano.eth shared this group on his Twitter. He wrote: “hey degen, are you stressed? Just let it out all out. Voice only tg channel for screaming”. Just as the Bitcoin turmoil continues, crypto traders have taken to Telegram to voice their feelings. Crypto investors can reduce their anxiety about losses by joining the “Bear Market Screaming Therapy Group” on Telegram. For crypto enthusiasts, there was the “gm” app, a self-described “meme app” which only allowed users to greet each other with “gm,” or “good morning,” a common acronym thrown around on Crypto Twitter and Discord. But the gm app was shut down back in September after a hacker reportedly gained access to user data. Developing social channels based on exchanging a single message isn’t exactly new, of course. Back in 2014, the “Yo” app was launched with the sole purpose of enabling users to send each other the greeting “Yo.” In the next window, choose the type of your channel. If you want your channel to be public, you need to develop a link for it. In the screenshot below, it’s ”/catmarketing.” If your selected link is unavailable, you’ll need to suggest another option.
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